Maiko-sama ya es tarde para la escuela, dios (suspiro) siempre es lo mismo con usted, durmiendo hasta tarde con esos videojuegos. Dormir hasta tarde es malo para una chica. 

Kaori-cha eso no importa mientras estés aquí para cuidarme. 

Bu-ueno es cierto Maiko-sama, dios (suspiro) es muy tarde esta sera la ultima vez en la que la ayudo a vestirse [siempre dice lo mismo].
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Así son todos mis mañanas, mi nombre es Kaori soy una chica de 13 años, vivo con la familia hayashi como la protectora de Maiko-sama aunque mas que ser su protectora soy como su maid (sirvienta) personal. La señorita Maiko es una chica de mi misma edad ella asiste a una prestigiosa escuela femenina, ella es muy inteligente, bonita y buena en los deportes pero en su casa es todo lo contrario así que yo me tengo que ocupar de ella en todo hasta bañarla. 

Pero la verdad no siempre fui Kaori es decir yo no era una chica yo nací como un chico, yo era huérfano y vivía en la calle hasta que Masako sama me acogió en su casa yo estaba mas que agradecido con él y me jure siempre ser fiel a la familia Hayashi. Sin embargo mi juramento me costo mi hombría.

cuando Maiko sama era una niña pequeña era una niña muy malcriada y mala conmigo hasta el punto donde por su culpa iba a volver a vivir en las calles. Maiko sama parecía odiarme y le había dicho a sus padres que ya no quería que yo viviera en la casa. 

Yo suplique que no lo hicieran e incluso le rogué a Maiko sama que haría lo que fuera por ella, entonces ella dijo- bueno si quieres quedarte tienes que ser una chica y no un chico- Al principio me pareció una ridícula broma pero como estaba desesperado acepte sin pensar en las consecuencias. 

En los días siguientes, la mama de Miko hablo a una mujer extraña la cual ayudaría a que me pareciera una chica, con una peluca, ropa interior y vestidos fácilmente me veía como una autentica chica, sin embargo las cosas no quedaron ahí, tenia sesiones donde la mujer extraña me enseñaba todo lo que significaba ser una chica. 

Mi vida como una chica era agradable Maiko sama se comportaba de manera diferente conmigo, era mas amable. Sin darme cuenta las sesiones con la mujer extraña empezaron a afectarme, realmente me comportaba como una chica, es decir la forma en la que hablaba y la forma en la que mi cuerpo se movía, mis expresiones era tan femeninas.

Paso un año hasta que la mamá de Maiko decidió que ya era hora de que me convirtiera en una chica de verdad, yo sabia lo que esas palabras significaban, es decir no era tonto sabia perfectamente que algo andaba mal con mi cuerpo, no solo me comportaba como una chica mi cuerpo se estaba volviendo femenino. La familia Hayashi era rica asi que me sometieron a una operación donde me quitaron mi pequeño pen* pase mucho tiempo en un hospital hasta que dijeron que estaba lista. 

Desde entonces mi vida ha sido genial no me importo dejar de ser un chico para convertirme en una chica y vivir como una por el resto de mis días, ser una chica realmente no era tan malo me acostumbre bastante a vivir como una chica, incluso desarrolle un gusto por la ropa, me encantaba usar todo tipo de conjuntos femeninos, cuando entre a la misma escuela que la señorita Maiko me emocione mucho por que iba a usar el uniforme el cual era muy bonito.

Hace poco tiempo escuche algo muy impactante, sobre Maiko sama, y era que en realidad La mamá de Maiko había dado a luz a un niño y no una niña, supe en ese momento que Maiko sama era ese niño y desde muy pequeñ@ lo convirtieron en una chica, por eso no le agradaba verme como chico y pidió que también me convirtieran en una chica, ahora entendía por que Miako sama tenia gustos que no todas las chicas tienen, pero tenia que fingir frente a todos y ser la chica linda, la hija de la señora y señor Hayashi.

Fin.  

no se si esta historia sea de su agrado o no pero decidí publicarla queria hacerla corta y no poner demasiados detalles. 

Feliz año 2019 

:D espero este año publicar más cosas.