Por jugar ser otrapersona

Pensaba que seria divertido entrar en una pagina de citas y fingir ser una mujer mayor rubia con un cuerpazo, en mi correo varios hombres me enviaron solicitud pidiendo tener una cita, resulto divertido burlarme de ellos algunos incluso me depositaban dinero, había encontrado mi mina de oro hasta que un día en mi casa desperté en el cuerpo de una mujer, una señora rubia con enormes tetas y un buen culo, busque entre mis cosas y no encontré nada de mi antiguo yo, mi casa había cambiado era la misma pero era femenino, había ropa tirada por todos lados, calzones, tangas, sostenes. Revise mis correos y no había rastro de mis correos originales solo la de Verónica la mujer ficticia que había creado quien al parecer se había vuelto realidad y era yo, en el correo de Verónica encontré un chat con un hombre de unos 55 años bien parecido que había quedado en desayunar con Verónica para conocerse después tener sexo, eso decía en los chats, el señor le había preguntado a Verónica si quería tener sexo y al parecer Verónica le dijo que sí. Mi cuerpo parecía moverse solo rápidamente me puse una tanga roja del piso, luego un vestido rojo, ponérmelo no resulto difícil, luego me acerque a un tocador me senté y mis manos automáticamente empezaron hacer su trabajo con el maquillaje y mi rostro. Mi cuerpo fue al armario en busca de unos tacones los cuales me puse, eran altos pensé en caerme al caminar pero no paso, salí de mi casa, pedí un taxi y me llevo a una dirección, ahora estoy sentado esperando al hombre extraño del chat este cuerpo no responde y actúa por su propia cuenta si esto sigue así sabre de primera mano como se siente tener sexo como mujer, rayos no quiero tener sexo con un viejo. ¡Ayuda!