Realmente me cuesta entender como rayos mi hija, me convenció de aceptar mi nueva vida, hasta hace unos días eramos padre e hija, pero ahora somo hermanas, nuca me gusto ver a mi hija en la casa con sus diminutos shorts y sus blusas sencillas que transparentaban sus pechos, pero ahora yo uso el mismo atuendo que ella, en la casa, ahora que las dos somos mujeres, andamos de esta forma en la casa, sin ninguna preocupación, aunque al principio no me agradaba la idea de usar unos simples shorts, que dejaban a la vista mis nuevas piernas lisas y torneadas y mis nalgas redondas, que por cierto mi hija me molesta por mis nalgas perfectas y siempre que puede me da una buena nalgada, aun es raro que mi propia se siente celosa de mi culo, y que me de unas nalgadas, cuando estoy desprevenido.
Ahora estoy acostada usando mi mini short rosado, mientras mi hermana, digo mi hija, me muestra las fotos que tomo de mis nalgas, y no me siento para nada atraído, como hombre siempre me fijaba de las nalgas de las mujeres, pero ahora no siento ese mismo deseo que antes, lo único que siento es orgullo de tener unas lindas nalgas.
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