Esther

"Maldición porque no puedo quitar esta estúpida sonrisa de mi rostro" eso fue lo que pensó Marcus un hombre de 55 años atrapado en el cuerpo de una chica de 21 años. 

Admito que fue algo increíble tener el cuerpo de una chica joven, jugar con mis pezones se sintió increíble y ni que decir de mi vagina fue la mejor masturbación de mi vida, parecía un sueño. Pero han pasado dos días y sigo en este cuerpo no planeo ni quiero vivir por el resto de mi vida como una mujer. 

Hace dos días Marcus despertó en el cuerpo de Esther una joven de 21 años, de piel morena que vivía con su novio David, sin embargo, su novio David no se encontraba en la casa debido a un viaje. Marcus no tenia idea sobre la vida de Esther. Así que cuando El novio de Esther llego a la casa. El cuerpo de Esther reacciono emocionada y excitada al ver a su novio a quien no había visto en casi una semana. 

Maldición, no puedo creer que haya ido corriendo a besar a ese chico, ¿por qué rayos mi cuerpo reacciono de esa forma? para colmo desde que vi a ese tipo la vagina de esta chica se esta mojando como una cascada. Espera que estoy haciendo ¿Por qué me estoy desvistiendo? este cuerpo no me hace caso no quiero desvestirme alto maldito cuerpo de mujer. De pronto David vio como su adorada novia se desvestía frente a el, estaba claro para David que su novia estaba hambrienta de su polla. Rápidamente Esther estaba desnuda y con su hermosa sonrisa frente a su novio. Ester noto como ya se la había puesto duro a su novio a través de sus pantalones. Esther como buena novia y perra en celo le quito la camisa a su novio, solo para excitarse aun más al ver su increíble cuerpo musculoso, sin embargo, Esther no paro y prosiguió a quitarle los pantalones a su novio. La enorme polla de David salió disparada frente al rostro de Esther, ella agarro el enorme pene de su novio con sus diminutas y femeninas manos y empezó a masturbarlo por poco tiempo hasta que Esther se llevo a la boca la enorme polla de su novio. David sabía que a su novia le encantaba chuparle la polla antes del sexo y después de pasar una semana sin verla, sintió qué su novia le había hecho la mejor mamada de su vidas. 

Marcus estaba horrorizado de ver como el cuerpo en el cual él estaba se comportaba como una pequeña zorra, desvistiéndose frente a un hombre, desvistiendo al hombre frente a él, excitarse al ver al hombre y encima arrodillarse y meterse en la boca la polla de ese desconocido. Pero lo que más le horrorizo era que aunque no podía tener control de sus acciones si podía sentir todo lo demás. Marcus sintió como su nuevo cuerpo se excitaba, sus pezones se volvieron duros y sensibles, su clítoris estaba de la misma forma. En cuando vio al hombre frete a el desnudo se éxito más y más, cuando vio la polla del hombre sintió la enorme necesidad de meterlo en su boca y chuparlo Marcus no quería sentirse de esa forma al ver a otro hombre pero no era capaz de reprimir esos sentimientos que inundaban su nuevo cuerpo. Marcus gritaba internamente al darse cuenta que sentía como la polla del hombre inundaba su boca, y su pequeña lengua saboreaba tremendo monstruo. 

Marcus sin darse cuenta se estaba dejando llevar por lo que su nuevo cuerpo descontrolado estaba haciendo. Los gritos internos de Marcus se estaban silenciando, estaba sucumbiendo al placer de chupar una polla cuando de repente el hombre se corrió en su boca gran parte de la leche del tipo fue directo a la garganta de Esther, ella estaba feliz de haber logrado que su hombre viniera, entonces Esther se trago el resto de la leche de su novio que tenia en la boca y luego limpio la polla de su novio con su lengua. 

Marcus ya estaba casi cediendo ante los placeres femeninos, recordó cuando se masturbo en ese cuerpo, y comenzó a pensar que tener sexo siendo él la mujer se sentiría fenomenal. 

De pronto Marcus aun de rodillas estaba exponiendo sensualmente su cuerpo al tipo al cual no solo le había dedo una mamada sino que además había tragado su semen. Cuando Marcus se dio cuenta de lo que estaba apunto de hacer su mente masculina casi hecha añicos intento retroceder pero ya era tarde por mas que Marcus odiara mostrar una estúpida sonrisa en su nuevo rostro estaba claro que él ya estaba en sincronía con el cuerpo de Esther y lo que Esther quería era tener sexo apasionado con su novio. 

Después de la gran sesión de sexo estaba claro que Marcus había desaparecido por completo, Marcus conoció la dicha de que un hombre la haga sentirse mujer. El miedo que tenia al principio de quedarse atrapado en el cuerpo de una mujer había cambiado al miedo de regresar a su antigua vida como hombre. 

Fin.