De lo más alto a lo más bajo

Yo era un mexicano y desde muy joven fui a los Estados Unidos a estudiar, con mucho esfuerzo logre convertirme en un gran empresario, yo había trabajado en varias empresas importantes pero, pronto decidí crear mi propio negocio, fue así que con mucho trabajo logre construir mi propio hotel, como todo negocio empece desde abajo hasta que con los años mi hotel se volvió famoso, yo procuraba darle empleo a los que como yo habían dejado México para encontrar otro modo de vida, era muy respetado por mis trabajadores no por ser un mal jefe o uno muy estricto sino por ser una gran persona con ellos, aparentemente mi vida estaba bien, pero yo no sabia que todo eso iba a cambiar. Me enamore de una mujer americana muy linda ante mis ojos, pero no sabia que ella solo me buscaba por mi dinero, después de casarme en nuestra luna de miel, no necesaria mente fue una luna de miel, el viaje era sorpresa para mi, yo no sabia el destino, pero cuando el avión llego a su destino, mi vida como la conocía iba a cambiar por completo, aparentemente todo iba bien de camino al hotel mi esposa me dio algo para tomar, después de tomarlo empece a sentirme mareado y con sueño. Cuando desperté no me podía mover mi cuerpo estaba completamente pesado, parecía estar en alguna cama de hospital, me asuste al pensar que había sufrido algún tipo de accidente, pero no era así, en su lugar después de permanecer quien sabe cuantos días ahí en esa cama, y con el único contacto que tenia era de una enfermera que solo iba a checar mi estado sin siguiera hablarme, llego el día que vi a mi esposa, quien me contó lo que me había sucedido. Mi corazón se rompió y mis lagrimas no paraban de salir, debido a lo que ella me contó. Mi esposa me dijo que ella realmente se había casado con migo por  mi dinero, también me dijo que había fingido mi muerte en un accidente, oficialmente yo estaba muerto y ella se había quedado con todo lo que yo tenia, entonces yo pensé que si eso realmente había echo, por que aun seguía con vida, lo más lógico era que me hubiera asesinado de verdad. Mi esposa prosiguió diciéndome que en vez de asesinarme pensó en otra cosa, ella dijo que me había echo algunos cambios en mi cuerpo de tal forma que había quedado completamente irreconocible, lo que me dijo después me sorprendí y no lo podía creer, me dijo que me habían realizado varias operaciones para transformarme en una mujer, yo como aun estaba en la cama sin poder moverme o hablar no podía creerlo hasta verlo, pero la simple idea me hacia temblar. Ella también me dijo que como me había convertido en mujer no tenia papeles ni siguiera una identidad, y que fácilmente seria deportado a México como mujer. Ella me ofreció un trato, el cual consistía en quedarme en EU como empleada en mi propio hotel y recibir un sueldo, además de una nueva identidad, de lo contrario si no estaba de acuerdo sería deportado a México. Yo no quería regresar a México así que después de pensarlo decidí aceptar su oferta, pero antes ella me advirtió que no debía contarle a nadie sobre mi verdadera identidad de lo contrario sería deportado. 

Después de algunos días y ya capaz de moverme comprobé que realmente me había convertido en una mujer, y con mis color de piel y con las operaciones parecía una mujer no creo que mexicana pero al menos sí latina. No lo podía creer parecía irreal tenia pechos con unos pezones oscuros y con enormes areolas, incluso mi ya no tenia un pene, en su lugar tenía lo que parecía una vagina, mis piernas y mis caderas todo mi cuerpo era parecido a la de una mujer promedio. 

Estaba muy triste por lo que me había pasado, yo quería estar enojado pero la tristeza inundaba más mis sentimientos. Cuando mi esposa apareció ante mi nuevamente era para firmar el contrato, y también para darme mi nueva identidad, aparentemente era una mujer mexicana de 29 años llamada Rosa Dominguez. de igual forma me informo sobre mi nuevo puesto que ocuparía en mi hotel o mejor dicho en mi antiguo hotel, me sentí degradado y humillado pues el puesto que me ofreció mi esposa era de mucama, también me dijo que tenia prohibido referirme a ella con su nombre o pensar en ella como mi esposa, pues eso se había terminado. 

Pronto llego mi primer día de trabajo y en vez de entrar por la puerta principal tuve que entrar por la entrada de los empleados, La señora Estefany quien era la de recursos humanos, fue la que me dio un recorrido por las instalaciones del hotel y me explico en que consistía mi puesto y quienes eran mis superiores. Al llegar al medio día dieron mi nuevo uniforme y me asignaron con María una mujer que aparentemente tenia la misma edad que yo, ella me dio la bienvenida y me explico a detalle lo que debía hacer, me enseño a doblar las sabanas, limpiar los baños, barrer y trapear, ella hacia su trabajo felizmente cosa que me transmitió, había olvidado pero, les había enseñado a mis empleados a realizar su trabajo con el mejor de los ánimos de esa forma se sentirían a gusto trabajando. Pronto me vi obliga@ a vivir con María entre las dos pagábamos el alquiler de nuestro departamento, era duro al principio cuando llegaba el día de pago recibía el mínimo, pero no tenia de otra. Al vivir con María me fui acostumbrando a vivir y comportarme como ella, y pronto nos volvimos muy amigas, en el trabajo como mencione María me había contagiado sus entusiasmo en el trabajo, pronto me había convertido en una experta en mi puesto como mucama y lo hacia con mucho gusto. 

Pronto la señora Madison quien era mi ex esposa, no to mi buen trabajo y quería que fuera a trabajar con ella a su casa, quería que yo fuera su sirvienta, yo al principio no quería pues me gustaba mi trabajo en el hotel además de vivir con María pero la Señora Madison me amenazo así que no tuve más opción que aceptar su oferta. Nuevamente regrese a la que era mi casa, pero no regrese como el dueño de la casa sino como la criada, pronto me instale en la habitación de servicio, mi vida era mucho mejor en el hotel, ya que en la que había sido mi casa, siempre tenia que estar limpiando toda la casa, era grande por lo que me turnaba para limpiarla a la semana, pero siempre tenia que prepararle el desayuno a la señora Madison, tenia que lavarle su ropa, y tenia que soportar que cada fin de semana metiera a hombres extraños a la casa, cuando limpiaba las sabanas sabia que habían tenido sexo, mi vida como la sirvienta de la señora Madison me tenia frustrad@ preferia regresar al hotel y trabajar como mucama que trabajar como sirviera a tiempo completo con la señora Madison.

Así que hoy le pediré a la señora que por favor me deje volver al hotel, aunque tengo mucho miedo de como vaya a reaccionar estoy decidid@ a pedírselo. 

-Disculpe señora quiero pedirle algo

-¿Qué quieres Rosa?

- Bueno pues....