No era un chico normal, crecí en el mal camino de la vida, mis padres se divorciaron cuando era niño y mi madre nunca me educo adecuadamente, se la pasaba saliendo con muchos hombres esperando encontrar al indicado pero nunca lo logro. Yo deje la escuela y me dedique a ser un delincuente, tenia mi propia pandilla y me respetaban, las personas que me conocían preferían darme su dinero antes de confrontarme.
Pude seguir teniendo ese estilo de vida, pero una noche me encontré con una linda colegiala, y pues la viole. Después de unos días unos tipos me secuestraron, cuando desperté tenia frente a mi a la chica que había violado con una carra que provocaría a mas de uno un miedo en todo el cuerpo, a su lado estaban una mujer y un hombre, luego me entere que eran sus padres, la chica con su mirada fría les dijo a su padres que efectivamente yo era el que la había violado. La mamá me dio una fuerte bofetada, mientras que la chica me pateo con fuerza en mis pelotas, sentí un enorme dolor tanto que ni pude contenerme y grite, por ultimo el padre me dio un fuerte golpe en la cara y caí desmayado, apenas pude ver y escuchar algo mientras poco a poco iba perdiendo el sentido. Solo escuche que el hombre diga "Eso es todo el resto se los dejo en sus manos".
Cuando desperté me dolía mucho el cuerpo entero además de que mi cuerpo estaba vendado por completo, estaba amarrado en una cama sin poder liberarme, pero lo primero que hice fue moverme con la esperanza de liberarme pero fue en vano, también quise gritar por ayuda pero mi boca estaba tapada. Estuve así por horas hasta que volví a ver al padre de la chica a la que había violado, pero solo para escuchar la terrible realidad de mi vida, el hombre me contó que había encontrado una manera de vengarse por haber violado a su hija y para evitar que volviera a hacer lo mismo con otras chicas, esa manera fue convertirme en mujer, el hombre riendo me dijo que jamas volvería a violar a una mujer por que ya no tenia pene,, yo no podía creerlo trate de gritarle o de comprobar lo que decía pero acostado y con las manos amarradas no pude comprobar si mi verga seguía en su lugar o no. El hombre me dijo que aun faltaba algo de tiempo para que mi cuerpo se recuperara al cien y me dejo ahí acostado mientras que intentaba gritar ante la desesperación. Después de mucho tiempo supe que era imposible zafarme y me tranquilice, en los siguientes días una enfermera estuvo entrando y saliendo de la habitación en la que encontraba por más que quise comunicarme con ella y pedirle ayuda me ignoro.
Después de mucho tiempo llego el día en el que me liberaron y me quitaron la vendas en mi cuerpo, pero ahí estaba la chica ala que había violado junto con sus padres y también dos hombre bien grandotes. Cuando las vendas se cayeron vi como dejaron a la vista mis nuevos pechos, eran grandes y tapaban mi visión hacia el lugar donde estaba mi verga, así que me incline un poco para ver mi verga en pero no estaba, ya no tenia un pene, solo había una raja tenia un hueco entre mis piernas, un coño, grite aterrado. Mi primera reacción fue golpear a quien estuviera cerca y esa era la chica, sin embargo ella rápidamente me tiro al suelo.
Desde que me violaste me tome clases de protección personal, pero aun así derribarte fue algo sencillo, sabes por que. hahaha eso es porque ya no eres un hombre eres una mujer mucho más débil que yo o mi madre.
No podía creer pero efectivamente mi fuerza había desaparecido mis, nuevos brazos eran blandos sin una presencia de fuerza muscular, Molesto les dije que los iba a demandar por lo que me habían hecho pero entonces la señora me contesto.
Nadie te va a creer, ademas eres el menos indicado para decir esas estupideces, cuando el criminal eres tu. Además déjame decirte con algo de dinero ahora oficialmente estas muerto, es por eso que nos perteneces, para empezar trabajaras en nuestra casa como una sirvienta y no te preocupes tengo muchas sirvientas ellas te enseñaran tus nuevos deberes y si no los cumples veras de lo que soy capaz.
La señora junto con su hija salieron de la habitación, pero entonces el hombre se acerco ami y sin avisar metió uno de sus dedos en mi coño virgen, él solo me susurro al oído que pronto seria suya, luego con su lengua me lamió mi mejilla, sentí escalofríos él hombre salio junto con sus guardias, luego una mujer con vestido de sirvienta entro y me dio algo de ropa para que usara, yo simplemente me puse a llorar por lo que me había pasado, y lo extraño era que nunca había llorado en mi vida siempre me aguantaba, pero por alguna razón no pude aguantar mis lagrimas en esa ocasión. La sirvienta me tranquilizo un poco y me pidió que me vistiera, le díje que no pensaba en ponerme esa ropa y ella me dijo que si no la usaba podría salir así desnuda, me rendí y me puse el calzón blanco de encaje y el brasier del mismo color. Cuando me puse esas prendas femeninas sentí como encajaban perfectamente a mis nuevas partes femeninas, además de que se sentían bastante bien el tacto de la tela con mi piel. Por ultimo quedo el atuendo de sirvienta, un vestido largo negro con un delantal blanco cuando termine de ponerme todo el atuendo lucia como la sirvienta a mi lado.
Durante casi un mes las sirvientas de la casa me estuvieron enseñado de todo, al finalizar mi entrenamiento yo me había convertido en una sirvienta ejemplar incluso aprendía a dar reverencias a los dueños de la casa. Todas las sirvientas sabían quien era y lo que había hecho así que no la tuve fácil, siempre me miraban con desprecio y decían que me tenia bien merecido lo queme habían hecho.
Durante dos meses estuve viviendo como Lucy la sirvienta de menor rango en la casa de la familia Madison, sin embargo pase de ser la sirvienta a ser la muñeca sexual del señor Madison, Debo decir que mi primera vez fue terrible y pude experimentar de primera mano ser una mujer violada. Los médicos que me habían hecho mujer hicieron un gran trabajo y todo para que yo pudiera experimentar la desfloración, el pene del señor Madision era enorme y sentía como de desgarraba por dentro, por más que estuve llorando y pidiéndole que se detuviera no me hizo caso, pero era evidente que él se estaba vengando y por supuesto no paro y siguió destrozandome el coño con su enorme verga, cuando se vino dentro de mi coño, me obligo a limpiar su pene con mi boca, yo me sentía completamente humillado y destrozado, sentía miedo, con asco limpie la verga del señor Madison tragándome toda su espeso semen.
Al día siguiente cuando me desperté lo primero que hice fue a la habitación de la señorita para disculparme por haberla violado, de todo corazón después de haber experimentado lo que le había hecho me sentí muy mal y me fui a disculpar de rodillas, por supuesto ella no acepto mis disculpas pero aun así quería que supiera que en verdad lo sentía por haberle hecho algo tan terrible también le dije que estaba en su derecho de odiarme para el resto de su vida y que haga lo que haga nunca podría enmendar mi error. De repente algo en mi cabeza me dijo que lo que estaba haciendo no estaba bien, era como si mi orgullo masculino me dijera que estaba actuando de una forma patética al disculparme con la chica ala que había violado.
El señor Madison siguió cogiéndome todas las noches, en su despacho. Ahora se que el señor Madison no jugaba cuando dijo que me iba a convertir en una adicta a su verga, cuando él estaba en su despacho yo estaba de rodillas chupando su verga, incluso lo hacia cuando desayunaba, mientras él desayunaba con us hija y esposa yo estaba debajo de la mesa chupando su verga como si de una paleta se tratase.
Llegó en punto en el que me alegró ser mujer y sentir el enorme placer de ser cogida por un pene grande como el del señor Madisón. En varias ocasiones el señor Madison me obligo a usar vibradores o consoladores cuando hacia mis labores de sirvienta.
El señor Madison noto como disfrutaba del sexo y de pronto él me ofreció a varios de sus amigos, ricos, ellos pagaban muy bien para que tuvieran sexo conmigo, Yo disfrutaba de tener sexo, me había hecho adicta a las vergas olvide el hecho de haber sido un hombre solo había tenido sexo una única vez pero no se comparaba con el placer que tener una verga en mi coño.
A uno de los amigos del señor Madisón le gusto lo puta que yo era que el señor Madison no tuvo de otra que venderme a su amigo el señor Darren. El señor Darren por supuesto me puso a trabajar como prostituta en uno de sus lujosos cabarets. Ahí uso todo tipo de trajes eróticos y mientras sirvo bebidas más de uno me toca las nalgas y cuando lo hacen, nunca imagine pude imaginar que terminaría así, pero a decir verdad mi vida apenas empieza me gustan las vergas y me gusta que me cojan, me éxito bastante de pensar en las vergas de todos los hombre que veo, que más puedo decir soy una puta pervertida por naturaleza.